Si señores, lo logramos!!! Pablo, Edu y un servidor coronamos el Tuc de Mulleres o Molieres como os guste más, el 05/07/2008. Y con crampones!!! Hay que decir que eramos primerizos en eso de subir con nieve (a partir del refugio nos encontramos con mucha) y lo de los crampones al principio no lo tenia muy claro, pues al empinarse la montaña no las tenia todas conmigo...pero a todo pasado puedo decir que subimos en condiciones perfectas, a primeras horas de sol con buen agarre y nieve blanda a la bajada, eso si yo seguia sin tenerlas todas conmigo!
Nos adentramos rápidamente al bosque de la Vall de Mulleres y empezamos a subir paralelos al rio, que pronto nos ofrece una primera cascada espectacular! Seguimos los hitos que nos adentran a una zona de rocas rompepiernas y al salir seguimos decidido el camino paralelo al rio que nos conduce
a la segunda espectacular cascada, con trepada incluida. Antes de llegar contemplamos lo que sin duda son los restos de una alúd virulenta que seguamente no hacia mucho se produjo.
Despues de la segunda cascada
llegamos a la antesala de la primera subida importante, pues ante nosotros tenemos una pared que oculta tras de sí el famoso refugio libre de Molieres (donde el año anterior pernoctamos con un clima horrendo y nos tubimos que volver con la cola entre las piernas con niebla y frio...y eso en pleno junio).
Esa subidita con la cámara de fotos y video (yo fiel a mis reportajes) mi hizo sacar la lengua y por poco el hígado, pues la hiimos sin parar a piñón fijo. Una vez superada y a las dos horas y poco, aparece al fondo un paisaje totalmente emocionante, el Mulleres y toda su cabecera nevada, con múltiples neveros ya allí mismo, y el refugio al fondo (2360m), parada obligada a desayunar!!!
Nieve hasta el final como demuestra Edu...
No hace falta describir las sensaciones allá arriba, sencillamente la ostia!!! Miraras donde miraras el paisaje era alucinante, y más con tanta nieve aún.
Unas 5 horas y media de subida que valieron la pena desde luego. Os lo recomiendo 100%.
La bajada pues mucho más rápida y más con una nieve ablandada por el sol. Pablo haciendo el animal para variar y poco a poco una sobrecarga en las piernas considerable.
Volvimos a parar para comer un poco en lago del refugio, helado y con un paisaje de ensueño. No hace falta decir que acabe molido de piernas, bueno, todos acabamos molidos tras más de diez horas de caminata...
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